Pero aquella tarde, tuvo un impulso, quiso realizar un experimento. Quería comprobar que no se había equivocado. Sabia que, sus gustos musicales eran si no mejores que los de sus padres, si eran abismalmente diferentes. Quería saber. Para ello debía experimentar. Bajo al espacioso salón y del mueble de la gramola extrajo las bandejas portadoras.
Allí comprobó claramente la docencia de los gustos. El enfoque y talante mas conservador referido a las generaciones paternas. Allí en un crisol más tranquilo podían recogerse las orquestas como la de Mantovani y anteriormente, las de Glenn Miller. Otro apartado era recogido por las bandas sonoras de autores como Henri Manccini.
Un lugar importante era el ocupado por los crooners. La pasión edulcorada que toda futurible suegra quisiera tener para sus hijas. Aunque alguno de ellos fueran gente como los taimados y juerguistas componentes del Rat pat: Samy Davids Jr., Deán Martin y como no, el más Capone de todos ellos, Frank Sinatra.
Pensó en el importante impulso que se había dado al formato para la escucha de la música. Se abandonó años atrás los arcaicos discos de78 rpm, frágiles y hechos de laca. De unos 25 cm de diámetro y unos tres minutos de música en cada cara. Si lo que se quería era una obra más larga lo que se hacia era comprar más discos con sus fundas metidos en un libro de cartón o cuero. De ahí viene la palabra álbum ya que se parecía a uno de fotografía.
Aunque él ya tenía discos de otros formatos como unos más flexibles de vinilo que tenían los surcos más estrechos. Los llamados singles de la RCA.
Pero sus padres también los tenían en formato más largo denominado Long Play de la Columbia. Posiblemente, independiente de la música del valor de mercado. Un LP sólo lo podían comprar los espíritus sosegados y tranquilos que habían hecho algo de fortuna. Los rebeldes sin causa. Incipientes devoradores de sueños e inquietas almas no conseguirían nada más que unos centavos. Lo justo para poder comprar de vez en cuando algún single de una valiosisima canción que vistiera sus almas.
La tarde transcurrió entre escuchas varias como un explorador de sonidos se perdió en un mundo de notas que no le decían nada. Había canciones que para él podrían salvarse. El problema era que no conseguía vivirlas como le pasaba con los singles que tenía escondidos en su habitación.
Cogió un papel y un bolígrafo. Quiso hacer una lista para enseñársela a sus compinches de audiciones para comparar si sus padres escuchaban los mismos discos.
Y así escribió con cierto aire perplejo y entre sonrisas los artistas y álbumes siguientes:
Nat King Cole The unforgettable. 1952
Mantovani. Christmas Carols. 1953
Mantovani. Strauss Waltzes. 1953
Entre los singles, mayor cantidad donde escoger anotó los siguientes
Andrews Sisters Boogie Woogie Bugle boy
Muchos albumes de Glenn Miller
Tuvo también curiosidad por una canción Besame mucho ya que a pesar de su ascendencia latina tenía muchas versiones entre ellas pudo descubrir la de Xavier Cugat y su orquesta; Sammy Davies Jr,; Mantovani; Nat King Cole; Eydie Gorme. Posiblemente sus padres se enamoraron con esta canción.
Bing Crosby Swinging on a star.
Perry Como Dream along with me
Pero, pronto se canso. No le motivaba nada de lo que estaba escuchando. No volvería a perder el tiempo en estas audiciones. Deseaba volver a la clandestinidad.
Próximo capítulo "Mi particular visión. Rock and roll. Capítulo 3" "Origenes".
Keep on rolling, my friend!!!!
ResponderEliminarMuy bueno, complejo, directo, peculiar y personal... Definitivamente mi afición a la música viene de la colección de vinilos que mi padre tenía/tiene, aquel plato impresionante, y el ampli de lámparas más impresionante que jamás ví (se calentaba como lamadrequeloparió), y mi curiosidad por aquellos temas en 45RPM y 33RPM...Espero con impaciencia como continúa esto....Un saludo!
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