Ir al contenido principal

Coronavirus día 97 a las pequeñas historias

Coronavirus día 97

A las pequeñas historias 


El sol luce tras la ventana. Mi pereza con el. Los gestos del hogar y el cuidado de Sara ocupa las horas de la mañana que asistimos. La labor del día ensucia mi libre espacio. Los juegos esperan, quizás un paseo en tardía hora de mediodía con mis cómplices de encierro. 


 Cerciorando el perfil del día. La sorpresiva mirada del alba hizo que recapacitase sobre los escepticismos que me asisten. La llamada, corroboró lo anteriormente enviado por el wassap. Las noticias que alimentaban enervaban el pulso constante del devenir interrogado. Con pose cabal, el agradecimiento ante la información recibida. 


Me calé mi sombrero de estrecha ala sobre mi pequeña cabeza y, emprendí un paseo en busca de calma. El pensamiento necesitaba del orden para compilar las ideas. Como la bitácora que permite al capitán planear un viaje. Las cavilaciones son tan necesarias como el arte de vivir. Es un instrumento para avanzar en los vericuetos de las cuitas que asisten al ego. Así pues, me sumergí en la expectación de las ideas. 


A pesar del escepticismo que me asiste con la sociedad compartida. A veces, determinadas personas me sorprenden gratamente. Una virtud para creer en la vida y sus gentes. Aunque no siempre sea la regla que borre la excepción. 


El rock and roll está hecho para bailar, al igual que las sorpresas positivas. Como cuando éramos los reyes de la nocturna apariencia. Vacua experiencia quizás pero plena, como el orgasmo en la habitación de un hotel vacacional, en ausencia de responsabilidades necesarias.  


No hay mayor despecho que el de no saber adaptarte a las gentes y a los pasos de la vida. Aunque, la humanidad avance, de una manera que no comprendo, me agarro a los pequeños hechos que engrandecen el verdadero sentido del hombre. 



Valga mi aullido a la empatía y a los tragos vitales que nos alientan optimismo. A las pequeñas historias que nos hacen crecer. 



Coronavirus día 97 18 de junio de 2020 


Comentarios

  1. Señor Jerry Lee, las pequeñas historias pueden hacer grande una vida. Sé, tras leerle, que no le descubro nada.
    Cuídese, disfrute del día y gracias una vez más por sus artículos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

“Buen deseo sea otorgado”.

En el silencio de la noche resuenan con alegría los cánticos de mi tierra. Y es ese recuerdo el que hace aflorar el sentimiento de la blanca navidad. Destellos y ráfagas de valores desgastados con el tiempo. Ajados por el desuso y el derrumbe de las buenas intenciones y los actos honestos, humildes consignas de una fe humana resquebrajada en los tiempos de fechas celebradas.  Por ello sana es la intención del buen deseo. Que no sea quimera como fiebre de vil metal. Costumbre cabal y querida la de una ilusión sentida año tras año al privilegio de la amistad sostenida en la vida. Al compromiso vital de hallar la estima y la Salud en carta cabal y en la fortuna dichosa de agradecer y sentir la vida cada día. Porque como la Navidad sea una plegaria constante en el nuevo año que te contempla.  Como diría el Papa Francisco: “No vivamos una fiesta falsa y comercial”. Complicado empeño aunque resuenen los cánticos de Mi Pueblo.  Feliz Navidad. Alma y aullido.   JaviJerryLee ©️ 2022

¿Y a ti, qué te han “echao” los Reyes?

Artículo publicado el diario digital La Opinión de Trujillo el 14/01/2013 Afrenta de fiebre, discurso de sábana y sudor. Así he estado hoy, con la cuita de la dama y la gripe ahogándose en los efluvios de los minutos transcurridos. Es el frío que llegó y aventó mis huesos. Es el pronombre enfermo de la humedad en las casas vacías. Son los Reyes Magos de mi pueblo que me regalaron la gripe a pesar de braseros y estufas, de calefacciones eléctricas que no calientan nada más que las facturas de los que pagan. Y así, la paja de mi cuerpo se heló en el frío interno que, por fin, me postró en cama un domingo de enero. En esta situación reviví una situación de días pasados. Un viejo amigo me encontré en la tertulia de un café. Javi Jerry Lee, al que conocí allá por el año 87 u 88 y desde entonces acompaña los pasos de mi vida, con mayor o menor intensidad. Pues bien, después del intercambio de saludos y de puesta al día de lo que ya conocimos, se aprestó a criticar plausiblemente cierta

Redes Sociales

Artículo publicado en el periódico digital La Opinión de Trujillo el  | 12 de Noviembre de 2013 Hace poco mi amigo Julio me escribió para sugerir un tema sobre el que versar uno de mis artículos. Esta es otra manera de alimentar al articulista de turno con las ideas del lector. Una forma más, también válida, de hacer que la comunicación se generé entre los lectores, ya que puede ser pulso vital del estado de la realidad. Centrado en otro de los vehículos de la comunicación: la visión de las redes sociales como un peligro para todos los internautas por su capacidad de influencia y de dirección. Esa fue de manera sucinta su argumento. Indudablemente, sobre este aspecto nada que objetar pero si puntualizar. Las Redes Sociales como otros poderes facticos de nuestra sociedad, tienen la facilidad de poder dirigir las opiniones o, al utilizarse como medio de masas, puede facultar ciertas tendencias, debido a la multitud de lectores o clientes prácticos y en potencia qu