Ir al contenido principal

"No conservo ganas en formol"

"No conservo ganas en formol"
09/05/2014
No conservo ni las ganas en formol. Ni formulo la solución disuelta ante tamaño desgaste. Ni desgasto los problemas porque los elementos van en contra. Encontrando tramos de difícil rima en los enveses de la vida. Acumulo la virtud de la risa y la sola esencia de lo sencillo. Escampar la ilusión no es tarea fácil para tipos como yo. A pesar del realismo costumbrista que enarbola la costumbre diaria del que vive. La vida son tragos que nos conservan en el alambre del que esta y sintiendo la raíz para encumbrar la copa. Pero las fuerzas no siempre son sostenidas en sí bemol y la fiereza del ocaso es un símil real de lo que es negado. 

Cambian leyes cambian cuotas y tercian sobre los no elegidos las consignas del desdén. Allá pues con la frustración, ellos seguirán libando sin consecuencias fatales pero en algún momento caerán, porque a todos nos llega nuestro San Martín y solo con la cara frustrada no nos vencerán. Nos levantaremos siendo más fuertes y valerosos. Cada vez que los escombros fenecen una obra nueva dará impulso, mutilando los lloros, valorando los aullidos. 

Se me va todo. Como se me va la vida. Tengo los bolsillos rotos con agujeros negros de tiempo perdido. No queda aliento ni marcha atrás. El tiempo se va por el inodoro de la realidad. Y las ganas que no se conservan en formol son solo los recuerdos de las ilusiones por hacer. 

Al menos alguien lee estas líneas y ese es el único camino para seguir y creer. Para crecer y compartir. Así pues gracias querido lector por seguir mis aullidos estacionales con la complacencia del agradecido. Me gustaría que compartáis o aconsejéis mi blog sólo  a los errantes de luna llena, con la semblanza de la buena fe. Solo a aquellos que consideréis hombres  o mujeres de bien. Porque esos serán los elegidos.  

Comentarios

Entradas populares de este blog

Coronavirus día 24 Esperanza la de la residencia

Coronavirus día 24 De la tristeza a la alegría solo hay un paso. En este vaivén circular solo hay que tener paciencia. El animo es inquieto y las noticias positivas siempre son consideradas. Descenso de muertes, ingresos en UCi y aumento de altas hospitalarias. Continuamos la lucha.    He recibido correo electrónico de una señora. Algo contrariado no dejo de sorprenderme.  Querido JaviJerryLee o como quieras hacerte llamar. Sigo con atención tu página y, quisiera darte a conocer otro enfoque.  Me llamo Esperanza y hace un par de días cumplí años, 94 para ser más precisa. Como bien puedes saber, he pasado por diversos acontecimientos en España. He vivido el hambre y la caridad. Pude cursar estudios, gracias a mis padres. Tenían un comercio que alimentaba al pueblo cuando no gozábamos del desarrollo de hoy día. Lo más grave, espero no se repita consecuencia de una guerra. Magisterio terminé y tuve la suerte de ejercer. A pesar de que no éramos muy bien remunerados

Coronavirus día 63 de la decisión

Coronavirus día 63 De la decisión  Ora ya la mañana en el despertar de un mayo anodino. Ora ya la hora del pulso encendido. Ora ya la decisión. Sin apercibir el pensamiento, en su silencio ora la necesaria firmeza para elegir a cada instante. Como todos.  Se dispuso a fregar con instinto asesino, un hombre de calmoso pulso. La decisión que debía tomar era la causante de sus nervios. Algo le decía que no era fácil y cualquier opinión al respecto iba a fracasar. Nada le haría convencer. Estaba condenado. Su deriva traería consecuencias.  Los niños jugaban en el jardín, bajo la atenta mirada del anciano. Para él, después de su crisis emocional, sus nietos le habían dado vida. Cuando eran mas pequeños, todos los días los llevaba y recogía del colegio. Se quedaba contando historias y jugando, mientras sus padres salían a divertirse o crecían en sus respectivas carreras profesionales. No debía olvidar que comenzaron en un pequeño apartamento. Cuando el abuelo se

Coronavirus día 34 Sara y el virus

Coronavirus. Día 34 “Sara y el virus” Como os dije ayer, un proyecto pretendía de nuestra colaboración. Presto confirmé la prestancia de mi intento. Sobre todo por la amistad que nos une. También como solvencia del Peter Pan que llevó dentro. Y que mi hija sea protagonista de unas aventuras pergueñadas por su padre y legado de la memoria. A la vez que impulsor de ciertos valores.  *el enlace  https://youtu.be/R9Nd0ME1r0Q os lleva al cuento oral. Posiblemente os guste más. Mis próximas colaboraciones en forma de cuentos podrán verse en  https://comunicabienestar.wordpress.com El cuento dice así.  La pequeña Sara en un día lluvioso miro por la ventana. Los cristales reflejaban tristeza. Y el ambiente era oscuro.  Al día siguiente la lluvia dejó las calles. Sara volvió a asomarse a la ventana. Con la cara expresó gestos claros. Un primero de asombro y sorpresa. Otro de duda. Acudió a su padre y le preguntó: Papá, papá. ¿Por qué el día es triste y oscuro si la lluvia