Coronavirus Día 22

Coronavirus. Día 22

Sigue aclarando y la polución huyendo. Afinando el tono y la visión, el cielo se viste de más color. La ciudad está más limpia y la contaminación está de vacaciones. Aunque sea un paréntesis y luego regrese con mayor fuerza. No está de más que, sintamos el ambiente que generaciones anteriores pudieron disfrutar. Espero comprendan lo primordial del impulso verde, y cambien después ciertas políticas a corto plazo. Como esperanzador la crecida diaria de altas hospitalarias y disminución de entrada de pacientes. 

Como limpieza la del común. Como el chiste sábado sabadete, limpieza y KH7. Me recuerda a principios de los ochenta, cuando en las emisoras de radio y en las primeras discotecas un hit español levantaba el ánimo de los jóvenes modernos. Sustituyan su título de “Bailando” por “Limpiando”. Seguro es número uno en los hogares españoles. Perdonen que les diga, pero las mañanas de muchos son agotadoras. Horario completo de limpia patena. Servirá para buscar nuevo trabajo en caso necesario. Como profesión de vital importancia. Esperemos después de la crisis suban sus salarios y no se aprovechen ciertos tsunamis de empresarios taimados de reventar el juego del convenio y amortajen sus ansias. Como viene ocurriendo desde hace años. Desde que la banca gana. Creo recordar en anterior crisis. En esta al menos, no solo serán rescatados los de siempre. 

Pero, para extrema limpieza la de la noche negra. De siempre me gusto. Coqueteé con ella y departí memorables encuentros. Incluso innumerables vivencias que enriquecieron mi alma. Así pues, intento ir con Donna a veces, pasadas las doce. Hora intempestiva pero con pocas posibilidades de encontrarnos con alguien. 

El silencio que percibo es distinto. Con matices diferentes. Quizás más vivo. Porque tiene más cuerpo. Aunque inquieta. Somos como zombis de una película de serie B, de aquellas que se hacían. Para entretener también a la juventud y, allá en los 50, de mantenerlos alejados del comunismo y enarbolar el nacionalismo americano necesario para ser los dueños del mundo. The american way of life, nos contaban. O por contra, podían aparecer los zombis como en el “thriller” de Michael Jackson y ponernos a bailar, avanzando con las piernas abiertas dando pequeños pasos y los brazos extendidos para atrapar a la víctima solitaria. 

Anoche no pasó nada de eso, a pesar de cierta inquietud bordada en la noche, quise hacer un homenaje a los Beatles y a aquella portada en la que atravesaban una calle por el paso de cebra. A medida que avanzaba encontré la idea. Rápido me dispuse para instruir a la modelo. Valoraba la suerte de encontrarme con un sereno que, calmase mis pasos. Saboteando el miedo de lo desconocido. Unos segundos de quietud y el retrato logrado. Porque las vivencias son las que nos hacen crecer.  Sumadas ellas dan como resultado la experiencia. Por eso, una vez pasadas es más fácil opinar y que opinen. Pero, el sereno no apareció como tampoco ningún censor del corto paseo. Ni ningún hombre ataviado con dos catanas que tuvieron que reducir los cuerpos de seguridad. Como está mañana. No mantener limpia la mente es lo que puede pasar en estos tiempos. Porque el encierro se prolongará. La adversidad de lo cotidiano puede ser enemigo de los sentimientos ajenos. Conserven la paciencia en buen estado. Resistan a entregar el buen humor y frecuenten la risa y la comunicación. No quisiera ninguna noche encontrarme ningún desesperado consecuencia de estas circunstancias. Relájense  pues con un maravilloso músico que nos ha dejado. Aunque alejado de los escenarios desde mediados de los ochenta, no quería ver censores en su alma. Bill Whithers con Ain't no Sunshine y Lean on me, referencias soul marcaron esos años. Aconsejo la escucha de varios de sus álbumes o para no iniciados, sus grandes éxitos. Encontrarán joyas con las que limpiar su corazón. El aullido poderoso será así más nítido y auténtico. 

Día 22 03 de abril de 2020 

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