Coronavirus día 64
Del minuto
Es el pensamiento el que atesora muchas veces las inquietudes de nuestro destino. San Isidro paso y los trajes de chulapos y chulapas no lucieron de igual forma que años fenecidos. Futuro que guardo en un minuto. Pensando en la consecuencia de los actos quizás. Obviando la barbarie de los pensamientos que guardan odio y rencor en los fantasmas que quieren revivir.
Me he repartido en el espacio profundo de un minuto silencioso. Garantizado el secreto del método. Me he arrojado al abismo insondable de mi interior. Con solvencia aunque con temor embarcado en las corrientes ignotas del pensamiento. Donde la fuerza del fluido me arrastra al devenir de un demiurgo inesperado. La alquimia no es el oro que busco sino el tiempo que perdí comprenderlo. No caer en el mismo error para así ampliar la riqueza de los minutos que guardo en mi bolsillo. Ahora que los mercados bursátiles pierden todo lo que generaron especulando y engañando. Solo es rentable el tiempo otorgado. Y así me arrojo en el silencio de mi minuto. En las profundidades de su ocaso. Y de allí extraigo una duda, una respuesta, una ilusión y un desengaño. Menudo minuto el que he vivido.
Sea el aullido condensado en un minuto quizás más efectivo que los gritos histéricos de un día.
Día 64 16 de mayo de 2020
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Kerouac97@hotmail.com
Más breve de lo habitual, pero igual de intenso.
ResponderEliminar¡Gracias, señorJerry Lee, por este minuto y muchos otros de lectura que nos proporciona en estos días!