Viene otoño preñado e impregnado de consignas. Arrastra la necesidad de la hoja caduca y su envoltorio es suceso baldío. Aleatoriamente la desnudez será la imposición de su peculio y el paisaje sencillo mostrará sus lamentos o pensamientos certeros. Otoño de triste pensar como un blues melancólico. Toma fácil el sentimiento y escapa como la noche que circuncida el día.
Los ciudadanos serán condenados y el rugir audible de motores será atronador devaluando al silencio. A pesar de, ser nuestra arma de rebeldía. Arderán los propósitos y las cuentas de resultados serán motivo de entredicho. Volverán los látigos de la incapacidad y los verbos serán imperativos.
Reposo apoyado en su regazo. Desnudos como el otoño mientras Sheryl Crow canta All I wanna do. Tan cierto como los olvidos que se plantean. Humilde el propósito, como difícil de pergeñar su sentido en este mundo de tiburones y brujas de solsticio. Tal y como reza lo único que quiero y deseo es divertirme antes de morir. Una filosofía sencilla como el vestido otoñal que cierne sobre septiembre. Por qué todo lo haremos tan complicado.
Ella multiplica sus brazos en un abrazo y su beso es un lametón de risa cómplice. Porque realmente eso es todo lo que quiero como Sheryl.
Retazo libre 8 de septiembre. Día de Extremadura
Un texto tan rico que invita a detenerse en él y a disfrutar de la música de Sheryl Crow. ¿Qué más se puede pedir?
ResponderEliminarEnhorabuena, señor Jerry Lee.